A bloguear, que el mundo se va a acabar!

Asi como lo leen señoras y señores, siendo hoy 18 de Mayo del 2011, dejo constancia en este espacio de que se les advirtió del inevitable apocalipsis, del rapto divino que tiene a más de un pecador con las lombrices en retirada y a muchos más seguidores del dios ese que nada mas ladra como perro apartamentero, convencidos de que este es el día en el que dicho ente va a alargar su celestial garra para salvarlos personalmente de la hecatombe que los ateos desalmados que comemos bebés y adoramos al patas le compramos a crédito a esta humanidad agobiada y doliente desde el principio de los tiempos.

Antes de que se atrevan siquiera a dudar de la veracidad de este anuncio, déjenme recordarles que la biblia, documento de absoluto valor histórico, escrito en rollo del mar muerto de la mano misma del creador, nos avisó desde el comienzo que estábamos condenados al infierno por ser la imagen y semejanza imperfecta de un ser que es tan perfecto que no tiene que dar prueba alguna ni de su existencia. De manera que si no han tenido tiempo de congraciarse con el de arriba, les espera cupo en alguna de las cinco pailas de aceite hirviendo que don Satanás menea con el rabo a intervalos regulares. Pero como todos los asistentes a este blog somos más fieles que novia fea a ese dios, no tenemos absolutamente nada que temer. Solo alistar una muda de ropa, un fiambre (que el cielo se ve aquí mismo pero queda bien lejos) y algún documento que pruebe que merecemos asi sea ir de bandera en las primeras chivas fleteadas por san Pedro. ¿Cómo?, ¿Que no tiene a la mano prueba fehaciente de su rigurosa observación de los misterios gloriosos, gozosos, dolorosos y vergonzosos?  ¿Que no tiene entre los bártulos del arrobamiento un misal o una camándula, o aun cuando sea un rosario de recordatorio de primera comunión? ¿Entonces como se le ocurre, infeliz descreído, que es usted digno de que dios voltee a mirar a su cuadra siquiera? O muchísimo menos de que lo escuche en medio del llanto y del crujir de dientes de tanto pecador arrepentido que se aferra a una cruz de tele ventas que le eleve la fe de último momento como quien se agarra de un pasamanos vomitado para no caer en una plasta de popó de burro. ¿Que creyó? ¿Que con leer este blog le iban a dar la boleta VIP, las alitas y el arpa portátil apenas bajándose del vehículo del rapto? Vaya a que le devuelvan lo de la matrícula, que esa platica se perdió. Leer este blog lo saca de la lista divina mas rápido que pepa de aguacate, mejor dicho, hace que si en algún momento sus datos personales se encontraron en el proceso de selección divina, ahora sean barridos debajo de la ultima alfombra del sótano mas profundo del vaticano, allá mismo donde guardan los archivos de los casos de curas pederastas. Alisten más bien ese cuero para las eternidades de tortura en el averno, donde seguramente nos encontraremos todos el 22 de Mayo, con excepción de los que si hicieron la reserva y pagaron el plan cuarenta y ocho horas antes de la partida.

Pero si son de los que están seguros de ser salvados, al menos aprovechen los  últimos días para leer este blog, dejarme un comentario y mandarme un giro por Western Union de lo que les sobre en el banco, total, en el cielo no van a necesitar ni el billete, ni el entretenimiento. (Lo que me costó abstenerme de rematar con "uno se muere y nada se lleva", para que vean como aprecio a mis lectores)